Catuxa Novo Estébanez y los Jardines, Bosques y Huertas de la Alhambra y el Generalife
Catuxa es ingeniera de Montes por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos y de Montes de la Universidad de Córdoba. Actualmente es la responsable del Servicio de Jardines, Bosques y Huertas del Patronato de la Alhambra y Generalife. Ha sido Jefa de Servicio de Espacios Naturales Protegidos en la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de Granada y previamente ha desarrollado otros trabajos relacionados con la gestión ambiental. Catuxa ha sido tan amable de responder a las siguientes cuestiones. P. ¿Podría comentarnos en qué consiste principalmente la labor que realizáis en el Servicio de Jardines, Bosques y Huertas? R. El Servicio de Jardines, Bosques y Huertas desarrolla tareas de mantenimiento y restauración de los jardines, las huertas, los bosques y el resto de espacios verdes incluidos dentro del Conjunto Monumental. Además, gestiona la fauna que habita en el monumento y su entorno (fauna deseada e indeseada), buscando siempre que exista un equilibrio de poblaciones y un equilibrio con el elemento patrimonial que estamos gestionando. También nos encargamos de la gestión del agua y las infraestructuras hidráulicas del conjunto monumental. P. ¿Cuáles son los principales problemas con los que soléis enfrentaros habitualmente? R. Averías imprevistas en la red hidráulica, inclemencias climáticas que afectan a parte de la vegetación y situaciones propias de la naturaleza, que en un espacio tan visitado pueden entrañar riesgos o molestias a los visitantes (caídas de ramas, aparición de animales molestos, incursiones de jabalíes, etc.) o para el propio monumento. Al gestionar elementos vivos, dado que la flora y la fauna están en continua evolución, no dan tregua y no permiten parones en su atención (riego, poda, recorte, plantación, tratamientos fitosanitarios, etc.). La otra dificultad es el realizar todas las actividades de mantenimiento y gestión con el monumento permanentemente abierto (363 días al año) y con una media de 8.000 visitantes diarios. P. ¿Podrías describirnos brevemente el proceso que conlleva cualquier actuación o proyecto que realizáis sobre los espacios ajardinados del Conjunto Monumental? R. En relación a la adecuación ordinaria de jardines, por ejemplo, un par de veces al año se cambia la planta de temporada, las flores de los jardines, para adornar y embellecer nuestros jardines en el momento de máximo esplendor de las mismas. El primer paso es hacer la planificación de todo lo que se va a poner en los distintos jardines. En este proceso, se intentan tener en cuenta todas las variables posibles: color, olor, tamaño, fenología, jardín en el que se van a colocar y contexto histórico. Una vez hecho esto, procedemos a la adquisición y producción de las distintas especies. Para ello recurrimos a varias vías: ? Compra a través de viveros y/o suministradores. ? Siembra de semillas en cada una de las unidades de propagación que posee el PAG, para posterior traslado a los jardines a los que estén destinadas. Se intenta usar variedades de plantas resistentes y que requieran el mínimo uso de agua. Especies mediterráneas que se adecúen a nuestro clima de la mejor forma posible. Igualmente se tiene en cuenta la asociación que puede existir entre las distintas plantas para minimizar el impacto de las plagas y los depredadores. Para organizar la siembra de la plantas en los jardines es muy importante tener una planificación exhaustiva. Es básico programar el mínimo de actuaciones en cada uno de los ?cuadros? (parterres) de flor en el que los jardineros ?pintan? las mejores obras de arte. De esta forma, se entorpece el mínimo a la visita pública y se evitan daños innecesarios por un excesivo pisoteo. En cuanto a actuaciones de restauración o recuperación de un espacio, como en el resto de intervenciones en el Conjunto, para actuar se requiere una fase inicial de documentación del espacio, origen, evolución, etc. luego una discusión de las actuaciones propuestas, siempre con distintas alternativas, y por último su ejecución. En muchos casos la ejecución precisa de seguimiento arqueológico y a veces, consecuencia de este seguimiento, se tienen que modificar las actuaciones previstas en el caso de que aparezcan restos o evidencias de interés no esperadas. Esta es la manera de trabajar, sin entrar en el procedimiento especifico que conlleva tramitar dichas actuaciones, que es muy garantista, al tratarse de un entorno de tan elevado valor patrimonial, lo que comporta que todas las actuaciones propuestas por la Alhambra deberán ser aprobadas por la Comisión de Patrimonio y obtener su correspondiente licencia de obras.
P. ¿Qué investigaciones o intervenciones estáis realizando actualmente? R. Son muchas y variadas las actuaciones e investigaciones que se están llevando a cabo, así pues no pretendo ser exhaustiva, sino resaltar aquellas que ahora mismo pueden resultar más llamativas. En cuanto a la gestión de las áreas verdes se está trabajando mucho en minimizar el uso de fitoquímicos. Se lleva años trabajando con la lucha integrada, para evitar el ataque de plagas y enfermedades (esto es utilizar, siempre que sea posible tratamiento natural de las plagas prescindiendo del uso de productos químicos). Para ello, se emplean los enemigos naturales de las mismas intentando enriquecer la población auxiliar existente. De esta manera se logra un equilibrio natural entre los insectos que son perjudiciales para las plantas con los que consideramos aliados para ellas. Hay grandes avances al respecto, cada año se consigue prescindir un poquito más de alguno de los productos fitoquímicos tradicionales. Aquí dentro se enmarcaría también el trabajo que se está realizando desde hace varios años de naturalización de cuerpos de agua, orientado a conseguir que las fuentes, albercas y abrevaderos constituyan un hábitat natural y en equilibrio, evitando el uso de cloro, de manera que estas infraestructuras vuelven a albergar una rica fauna, convirtiendo así a la Alhambra en un enclave (de nuevo) idóneo para determinados anfibios que habían desaparecido del núcleo urbano de Granada (como el sapo partero bético o el gallipato). En cuanto a intervenciones concretas estamos trabajando, a nivel de proyecto y estudios previos, en mejorar determinados espacios públicos del Conjunto Monumental y su entorno, como son la Cuesta del Rey Chico, el área del secano, el Partal Alto, el entorno de las ruinas del Palacio de Abencerrajes y la ladera del bosque de la Alhambra. Esperamos pronto poder exponerlos y empezar a ejecutar parte de ellos. Otra apuesta muy interesante en la que estamos trabajando es en la recuperación completa de la Acequia Real, actuación en la que nos gustaría poder actuar con voluntariado y así involucrar a parte de la sociedad en la recuperación y el mantenimiento de este elemento hidráulico tan importante para la Alhambra.
Las huertas del Generalife, es otro de los elementos sobre los que recae nuestra atención, así como la adecuación del Carmen de Peñapartida para que pueda incorporarse a las opciones de visita. P. Para hacernos una idea de la magnitud de los jardines, bosques y huertas de la Alhambra y el Generalife, nos interesaría conocer los siguientes datos: ¿Cuántas especies podemos encontrar en las instalaciones del Patronato de la Alhambra y Generalife? R. Más de 500 especies, 400 de carácter ornamental y 100 de carácter hortícola. P. ¿Cuántas plantas se reponen/producen anualmente y cuál es la presencia de especies de fauna? R. Teniendo en cuenta la flor de temporada, aquellos cuadros que cambiamos dos veces al año, estamos hablando de mas de 80.000 ejemplares de plantas de estación, de las cuales más de la mitad, unos 50.000 ejemplares, son de producción propia, en las instalaciones del PAG. Fauna: Los datos que recogen las investigaciones realizadas recientemente por el Patronato confirman la presencia de 161 especies de fauna vertebrada, agrupadas en 22 órdenes y 56 familias. P. ¿Cuántos litros de agua son necesarios en la Alhambra al día? R. Puedo decir cuánta agua hace falta que discurra por la Alhambra en verano, que es el momento de mayor demanda. Hay que tener en cuenta que parte de la que hacemos circular a través de los canales de la Alhambra luego va a parar a otros Cármenes con derecho a agua (como por ejemplo el Carmen de Los Mártires), a arroyos artificiales generados con las sobrantes de nuestras aguas (como el arroyo que baja en la Cuesta de los Chinos) o vuelve al río Darro a través de la infiltración. En verano circulan unos 5.500 m3 de agua y en invierno es un tercio la cantidad de agua que hacemos circular por nuestros canales. Texto realizado por: Gonzalo De Lázaro Gonzalo (asesor técnico del Servicio de Investigación y Difusión) Alejandro Daza García (experto en arquitectura y patrimonio)
Almudena Rozas / 7 years ago
Desde siempre lo que más me ha gustado de la Alhambra son sus jardines, pero no podía llegar a imaginar la cantidad de flores, agua y cuidados que son necesarios! Increíble! Cuando vuelva lo veré de otra manera.
Francisco Castro / 7 years ago
Apasionante! Cada día me sorprende más la labor que hay detrás de la Alhambra.