Brígida Gallego Coín: “Mis dos grandes amores de Granada son la Alhambra, el Albaicín, La Vega de Granada y Sierra Nevada”

La última entrevista de 2024 es con la escritora y periodista, Brígida Gallego Coín. Su novela, Isabel de Solís. Soraya, cerrará el Club de lectura de la Alhambra 2024, el martes 12 de noviembre en la Fundación Rodríguez Acosta.

Esta vez, por razones de agendas, la entrevista se hace ‘como en los viejos tiempos’, es decir, por teléfono, algo que hoy en día, con la vorágine de la tecnología y redes sociales, es difícil que suceda. La escritora granadina, que hoy se encuentra residenciada en Málaga, lo primero que dice al contestar la llamada es «¡qué puntualidad!». Es martes, el reloj marca las nueve de la mañana y un grabador se enciende para dejar registro de nuestra conversación.

Vi en tu última publicación de Instagram (para el momento de la entrevista) que tu padre va a presentar un libro.

A mi me viene la vena literaria por mis padres.

Eso te iba a preguntar, que por ahí debe venir algo.

La vena creativa en mi familia ha sido muy potente, todo el tema artístico, ha sido lo más fuerte. Mis padres –yo lo digo siempre- nos educaron para la belleza, para el arte. Mi madre es periodista, ella también ha escrito bastante, pero mi padre publica muchísimo.

Entonces, Brígida, tu tienes un poco de los dos –de literatura y periodismo- pero además de esto, ¿qué otro tipo de arte te gusta?

Me gusta todo. Nosotros empezamos a estudiar música desde muy pequeños, con 6 años; por eso te digo que siempre nuestros padres nos han dirigido a un mundo artístico.

Todos los estudios del colegio y del instituto los compaginé con la carrera de música (estudió piano). Coqueteé un poco con el arte dramático -que también entré en el Conservatorio Superior de Arte Dramático y Danza de Sevilla- pero acabé abandonándolo, no me apeteció seguir.

Yo siento que el gentilicio de Granada, el ser granadino, es muy especial. ¿Cómo llevas, ahora mismo, ser una granadina que vive fuera de Granada?

Yo me considero ciudadana del mundo, ante todo y he vivido en muchos sitios, pero de todas maneras, estoy enamorada de Granada. Mis grandes amores de Granada son la Alhambra, el Albaicín, la Vega de Granada y Sierra Nevada. Estos cuatro sitios son mis motores de inspiración.

¿Y por qué escogiste la historia de Isabel de Solís como punto central para desarrollar esta novela?

Porque como periodista he estado yendo todas las noches, durante todos los años, al Festival de Música y Danza con mi madre –ella trabajando para los medios de comunicación en los que trabajaba y yo para los míos- y una vez tuve que entrevistar, me acuerdo perfectamente, a Daniel Barenboim, Director de orquesta, y haciendo tiempo para la entrevista me fui a uno de mis sitios favoritos, el mirador de San Francisco, a tomarme algo. Desde ahí se ve perfectamente la Torre de la Cautiva, que es donde estuvo Isabel de Solís según cuenta la leyenda. Entonces yo pensé: «¿cómo pudo ser la vida de esa chica tan joven y cautiva en una torre que no es una torre normal, es una torre palaciega, pero no deja de ser un cautiverio? ¿Cómo tuvo que ser su vida?» Y justo en ese momento pensé: ¡voy a escribir la vida de Isabel de Solís! Era verano y me dije «tengo que escribir el libro en dos meses, porque sino ya empiezo en octubre con el periodismo otra vez súper fuerte y ya no acabo la novela».

¿En dos meses la escribiste?

Sí, en dos meses de verano prácticamente sin dormir, levantándome a las cinco de la mañana. Bueno, cuando escribo me pasa eso: no duermo nada porque estoy abducida por la historia que quiero escribir, entonces me levanto a las tres, escribo hasta las siete…Escribo mucho de noche.

¿Eres muy disciplinada?

No soy disciplinada. Odio la disciplina. Soy anárquica total.

¿A qué te refieres con ser anárquica?

Que voy a mi ritmo pero de manera muy intensa. No tengo reglas, normas, horarios. Eso si: cuando quiero escribir escribo intensamente pero sin orden.

Me llama mucho la atención cómo muestras a Isabel de Solís. Arropada por la orfandad desde muy joven y luego a lo que se enfrenta -la lucha de dos religiones, el convivir entre dos mundos- pero siempre aferrada al amor. ¿Tu crees que el amor es la respuesta a todo?

Sí. Indiscutiblemente para mí, por mi forma de ser y por mi mentalidad, el amor es lo más importante y por eso mis libros siempre rondan en torno al amor y quizás son muy de emociones. Hay libros que son más críticos, otros que se regodean mucho en la parte técnica de la vida, pero para mí el motor de mi literatura es el amor.

Ya para finalizar la entrevista, si te digo la Alhambra ¿en qué piensas?

Se me viene a la mente el adjetivo sublime. Para mí es el palacio más bello del mundo. De hecho en uno de mis cuentos, El hada de la Alhambra, lo digo: no hay palacio más bello que la Alhambra en el plantea. Es el culmen de la belleza y al mismo tiempo de la sabiduría a la hora de construir, de diseñar, de estudiar las corrientes de agua, las corrientes de aire; la sabiduría del jardín, las flores, los perfumes, los olores. La Alhambra también es un sitio de intriga, evidentemente.

Entrevista realizada por Betty Hernández.