Una placa recuerda el nombramiento de Leopoldo Torres Balbás como arquitecto de la Alhambra
Una placa realizada en piedra caliza de Sierra Elvira recuerda desde hoy en el edificio donde vivió Leopoldo Torres Balbás, junto a la Puerta del Vino, su nombramiento hace cien años como arquitecto director de la Alhambra. “No podemos olvidar que el monumento actual debe su esencia en gran medida a su legado”, ha destacado la directora general del Patronato de la Alhambra y Generalife, Rocío Díaz, durante el descubrimiento, al que también han asistido los nietos del arquitecto, Rafael y Míriam Torres.
Leopoldo Torres Balbás, que fue nombrado arquitecto director de la Alhambra por Real Decreto de 20 de marzo de 1923, ocupó el cargo hasta su relevo en 1936. A lo largo de esos trece años, como ha explicado Díaz, “realizó una serie de intervenciones cuya principal característica fue el respeto a todas las épocas por las que había pasado el monumento granadino, siguiendo una minuciosa investigación histórica”.
Una “brillante labor de conservación y restauración” que ha permitido que el conjunto nazarí llegue hasta hoy en unas adecuadas condiciones de integridad y autenticidad, como así se ha abordado en la jornada técnica celebrada esta mañana en el Palacio de Carlos V, dentro de la programación especial que el Patronato de la Alhambra y Generalife ha preparado con motivo del centenario de la llegada de Torres Balbás al monumento granadino.
En ella han participado, además del coordinador del programa, el profesor de la Universidad de Granada Carlos Vílchez, Alfonso Muñoz Cosme, de la Universidad Politécnica de Madrid; Francisco Javier Gallego Roca, de la Universidad de Granada; Antonio Orihuela, de la Escuela de Estudios Árabes de Granada; Ángel Isac Martínez de Carvajal, de la Universidad de Granada; y Julián Esteban Chapapría, de la Universitat Politècnica de València.
El Patronato de la Alhambra y Generalife también ha abierto un espacio dedicado a Leopoldo Torres Balbás en el Despacho del Emperador para acercar su figura, así como las principales restauraciones que llevó a cabo en la Alhambra, entre las que se encuentran el Patio de Machuca, el Patio del Harem, el Pórtico y Torre de las Damas, la Torre de Comares, el templete oriental del Patio de los Leones o los baños del Polinario.
La programación especial contará también a lo largo del año con visitas guiadas por especialistas, nuevos itinerarios dentro del programa educativo y una publicación que recogerá los proyectos de obras realizados por Leopoldo Torres Balbás en la Alhambra de Granada.