Las puertas de alhacena del Palacio de los Infantes
Las puertas de alhacena del Palacio de los Infantes es la pieza del mes de agosto en el Museo de la Alhambra. Todos los sábados, a partir de las 12:00 del mediodía, el Patronato de la Alhambra y Generalife organiza esta actividad gratuita, que conducirá la restauradora y licenciada en Bellas Artes, María José Ortega, en la Sala V. Las puertas, procedentes de una alhacena de la Casa de los Infantes, están realizadas en madera de ciprés y decoradas con taracea de madera, hueso y marfil.
En Mesopotámica, hacia el año 2600 a.C. ya se utilizaba la técnica de la taracea. En Occidente, esta técnica se introduce a través de al-Andalus. Las puertas, de enorme belleza por su magnífica factura y su delicada decoración geométrica de lazo, se componen de un marco y dos hojas unidas a éste, mediante pequeñas bisagras de bronce.
Estas bisagras junto con las que tiene la celosía de la Qubba Mayor (sala de Dos Hermanas), son únicas por su estructura ya que, tanto en el marco como en las hojas, se encuentran clavadas dos argollas pequeñas en cada lado, que se entrecruzan y atraviesan con un perno, que hace posible que las puertas se unan al marco y se puedan abrir y cerrar.
Las hojas están decoradas por ambos lados y el marco solamente en su parte externa. Cada frente de las puertas es distinto. En su cara interna, la decoración de marfil hueso o maderas diferentes están incrustadas en los soportes de cada puerta. En su frente exterior, la decoración presenta una serie de piezas de maderas de colores y hueso, que se combinan de forma magistral para formar una geometría de lazo, que cubre toda la superficie con la taracea pegada y no incrustada.
Horario: Todos los sábados del mes de agosto, a las 12 h.
Lugar: Sala V, Museo de la Alhambra, Palacio de Carlos V.