Canecillo del alero del patio de Comares

El palacio de Comares, obra clave de la construcción del sultán Yusuf I, alberga el emblemático  salón que le da nombre, verá como en 1855 el pórtico que antecede a dicho espacio, es apuntalado a causa del desplome producido por la pudrición de varios de los maderos que conformaban su primitiva cubierta nazarí a un agua que cobijaba, tanto el pórtico como la contigua sala de la Barca. Será pues el desplome de la galería del pórtico Norte del patio del palacio de Comares, el que marque el inicio de las grandes campañas, llevadas a cabo por Rafael Contreras, con el concurso del ingeniero D. Ramón Soriano, y los arquitectos Baltasar Romero y Juan Pugnaire en 1857, que  transformarán el aspecto nazarí del conjunto con el añadido adornista de elementos constructivos, cuya imagen perdura hasta hoy.
Será en este momento cuando producto de la intervención del alero, pase al fondo de los depósitos, este canecillo que desde el punto de vista estilístico difiere de  los del patio de palacio del Riyad, ya que a diferencia de éstos, aquellos se resuelven mediante la talla en ochos, es decir,  llevan como decoración en sus costados una serie de nudos simples desarrollados a lo ancho, tallados con poca profundidad y coloreados, evolución de los canes y modillones de lóbulos califales.
La presentación de esta pieza, que se contextualiza en el marco de la carpintería nazarí, nos sirve de introducción para relatar una de las intervenciones ejemplares llevadas a cabo en los palacios de la Alhambra en el siglo XIX, preámbulo de la praxis adornista efectuada a posteriori por Rafael Contreras Muñoz, imagen hoy día de esta zona del palacio. 
Horario: Los sábados a las 12 h
Lugar: Sala V, Museo de la Alhambra, Palacio Carlos V