Losa Sepulcral de la Rawda de la Alhambra
Una de las grandes incógnitas sobre la dinastía nazarí es el paradero de los restos de aquellos reyes que dominaron el último territorio musulmán de la Península Ibérica.
En la ciudad de la Alhambra, y tras el impresionante Palacio de los Leones, podemos ver algunos vestigios de aquel lugar donde quedarían depositados para toda la eternidad: la Rawda, un espacio funerario y muy próximo a la mezquita. En él se encontraron lápidas de varios antepasados de Boabdil, sultanes y príncipes cuyos cuerpos, según la historia, fueron trasladados al producirse la llegada de los cristianos a esta imponente ciudad. Su paradero se desconoce, aunque hay hipótesis y se sigue investigando sobre ello.
Algunos elementos funerarios quedaron in situ y fueron rescatados y conservados pudiendo, hoy día, apreciar su gran valor histórico y, por supuesto, artístico, en el Museo de la Alhambra.
Una de las estelas procedentes de ese cementerio real será la protagonista, y nos servirá de ejemplo para abordar diferentes aspectos relacionados con el ritual funerario en sí, como puede ser el caso de la normativa que lo rige o la implicación social que existe en torno a él.
Con un largo que poco supera los 170 cm, la decoración que presenta no deja duda alguna sobre su origen. Analizaremos las características y técnicas que la definen. En este caso, podemos adelantar que este bloque marmóreo evoca un delicado trabajo de talla y pulido que nos traslada en el tiempo pero que no se aleja de la actualidad. La epigrafía, la geometría… en definitiva, la ciencia al servicio de la religión. Brevemente, haremos un estudio comparativo de cómo diversos factores influyen en esa producción funeraria, ya sea por razones sociales, económicas o geográficas.
Horario:
- Los sábados a las 12 h (el sábado 31 no habrá presentación)
Lugar:
- Sala VI, Museo de la Alhambra, Palacio Carlos V